La descarbonización del planeta es uno de los objetivos que se han marcado países de todo el mundo de cara a 2050; una de las soluciones que se están desarrollando en algunas naciones, son las energías renovables como lo es el ‘hidrógeno verde’ que también es conocido como hidrógeno renovable o e-Hydrogen.
¿Te preguntarás qué es el hidrógeno verde y para que se utiliza?, ¿Será posible realmente contribuir a acelerar la transición energética? El hidrógeno es el elemento químico más abundante en el universo, ligero y muy reactivo. Tanto las estrellas, como nuestro Sol, están formadas principalmente de este gas, aunque también puede tomar un estado líquido.
Este material renovable se adquiere de diferentes maneras, puede ser utilizando combustibles fósiles, con la energía eléctrica o gas natural, pero la fórmula más amigable con el ambiente es producirlo con energía solar y eólica, lo que significa es que se obtiene a través de la electrólisis, un método donde se emplea la corriente eléctrica para separar el hidrógeno del oxígeno que hay en el agua, por lo que, si esa electricidad se obtiene de fuentes renovables, produciremos energía sin emitir dióxido de carbono a la atmósfera.
Es importante destacar que en las últimas estimaciones de la Agencia Internacional de la Energía (AIE), publicadas a finales de 2019, prevén un aumento de la demanda energética global de entre un 25 y un 30 % hasta 2040, lo que en una economía dependiente del carbón y el petróleo significaría más CO2 y el agravamiento del cambio climático.
En ese sentido, el multimillonario Bill Gates, recientemente publicó un libro llamado “How to avoid a climate disaster” (Como evitar un desastre climático) en el que afirma que el hidrógeno verde es el mejor combustible y la mejor inversión en la innovación de los últimos años para combatir los efectos negativos que se están generando actualmente en el mundo.
Un ejemplo de que es posible marcar un cambio en el mundo, es lo que hace un país como Dinamarca, que ha conseguido producir hidrógeno verde utilizando el ‘modo isla’. Se trata de un prototipo de un proyecto, el cual es capaz de producir este tipo de combustible sin necesidad de estar conectado a la red eléctrica.
Específicamente se trata de la electricidad que producen los generadores eólicos separando los átomos de hidrógeno y oxígeno para producir hidrógeno verde gracias a la energía del viento; es así como la energía se produce a través de un aerogenerador de 3 MW, que produce electricidad limpia para alimentar un electrolizador de 400 kW, haciendo posible la distribución de esa energía renovable a la red.
Finalmente el llamado hidrógeno verde, es 100% sostenible, pero su produccion resulta mucho más costosa que la del hidrógeno tradicional. No obstante, se cree que podría ser una solución ecológica para algunas de las industrias más contaminantes, como la del del transporte, la producción química y la del acero, y la generación de energía.
Emilia Beltrán (Divulgación y Difusión PIT-UAS)