A pesar de que el transporte aéreo tiene sus orígenes cerca de 250 años atrás, es considerada uno de los medios de transporte más reciente. Todo inició en 1782 con la llegada del globo aerostático, inventado por los hermanos Joseph y Jacques Montgolfier, posteriormente para el siglo XX, los hermanos Wright, fueron los pioneros en el rubro de la aviación y así sucesivamente ha venido evolucionando, a tal grado que hemos llegado a los aviones eléctricos.
Con el lanzamiento de los automóviles eléctricos, era cuestión de tiempo que el medio de transporte aéreo también comenzara a convertir los aviones en un medio sostenible y ecológico. Para llegar a este gran avance tecnológico, la circunnavegación del Solar Impulse 2 fue pieza fundamental luego de que lograra dar la vuelta al mundo solamente con el apoyo de la energía solar.
Para empujar el desarrollo de los aviones eléctricos se han tomado algunos factores importantes como los siguientes:
- Eliminar el consumo de combustible.
- Disminuir las emisiones de gases de efecto invernadero a nivel mundial, los aviones tradicionales causan el 4% de ellas.
- Los pasajeros se verían beneficiados con los costos de los vuelos.
- La capacidad de mantener el rendimiento a altitudes mayores donde la resistencia es menor.
- El número de pasajeros que puede abordar el vuelo es uno de los desafíos complicados que se deben resolver.
- La creación de un sistema de refrigeración adecuado.
Dentro de los grandes proyectos con los que cuenta la Administración Nacional de la Aeronáutica y del Espacio (NASA, por sus siglas en inglés), uno de los más importantes se ha venido desarrollando hace 20 años atrás, el X-57 Maxwell, primer avión experimental totalmente eléctrico que presenta una extensa gama de beneficios potenciales para la aviación. Este prototipo, influirá a establecer estándares de certificación a medida que la demanda de aviones eléctricos comience a sobresalir.
Diversas compañías se adjudican ser los innovadores en la industria aeronáutica, al crear el primer avión eléctrico. El avión ePlane creado por la aerolínea canadiense Harbour Air Seaplanes y el fabricante de motores eléctricos MagniX; por su parte la empresa eslovena Pipistrel destaca que su creación Velis Electro es el primer avión eléctrico certificado; mientras que la marca española Altea, anunció que Alice será el primer avión eléctrico, podrán opinar diferente estas empresas, sin embargo, cada uno de estos aviones tiene su particularidad y se tiene que reconocer el esfuerzo que hacen estas empresas para incursionar en este mercado.
El ePlane realizó su vuelo con éxito en diciembre de 2019 con un recorrido de 15 minutos sobre la ciudad de Vancouver, este avión para seis pasajeros tiene una antigüedad de más de 60 años fue potenciado por un motor completamente eléctrico, la aerolínea Harbour Air Seaplanes tiene la intención de pasar su flota entera a motores eléctricos.
El Velis Electro es un avión ultraligero de dos pasajeros y es capaz de alcanzar los 200 kilómetros por hora, AlpinAirPlanes lo adquirió a Pipistrel, y son los primeros en recibir el certificado de la Agencia Europea de Seguridad Aérea para poder operar en el mes de mayo.
Por su parte, Alice es un avión 100% eléctrico con capacidad para once pasajeros, incluidos piloto y copiloto, cuenta con una autonomía de 1.000 km y alcanza velocidad de crucero de 450 km/h. esta aeronave fue presentada en la 53 edición del Salón Aeronáutico de París-Le Bourget en Francia y que espera comercializar la empresa israelí Eviation en 2022.
A pesar de ser una innovación tecnológica reciente, estos avances han venido evolucionando la industria aeronáutica y sin duda alguna podrán verse reflejados demasiados beneficios, principalmente en el medio ambiente.
José Alfredo Careaga Ochoa (Comunicación y difusión, PIT-UAS)