¿Deseas crear tu propia comida? Con la impresión 3D ya es posible, en la elaboración de alimentos habrá una biblioteca de opciones, podrás elegir cada una de ellas e ir ajustándose como mejor lo considere, si se tratase de un bistec o ciertos cortes de carne, lograrás elegir la cantidad de marmoleado, la grasa interna o externa, solo es cuestión de elegir e imprimir. Aunque para algunos esto suena a ciencia ficción, en algunos países europeos es toda una realidad.
En ese sentido, lo que hace posible la impresión y distribución de estos alimentos, son algunas empresas que ya se encuentran operando, así como restaurantes que están revolucionado la manera de crear y cocinar. La empresa israelí Redefine Meat se ha asociado con uno de los importadores de carne de alta gama, Giraudi Meats, la cual se encarga de la distribución de cortes de carne tipo “New Meat” o corte New York, de toda Europa.
A su vez la empresa internacional Steakholder Foods Ltd., dio también a conocer su nuevo producto, cortes de carne de vacuno impresos en 3D llamados Omakase Beef Morsels, y en los que certifica un producto cárnico, con buena textura, que incluso ya ha patentado el tipo de tecnología utilizado en estos alimentos.
Por su parte, la empresa Redefine Meat elabora sus productos a partir de ingredientes que incluyen proteínas de soja y guisantes, garbanzos, remolacha, levaduras nutricionales y grasa de coco. Las alternativas a la carne de origen vegetal se han vuelto cada vez más populares sobre todo aquellos que prometen calidad de vida gracias a sus productos.
Sin embargo, no es la primera vez que la impresión en 3D demuestra su versatilidad al producir “figuras” o piezas mecánicas, también lo fue al desarrollar incluso viviendas; en el ramo de la medicina, la fabricación de órganos, tejidos, prótesis e implantes, continúa sorprendiendo y sin límites en la impresión de la tercera dimensión.
Así mismo, concierne a la elaboración de comida en 3D, uno de los restaurantes conocidos por cocinar bajo esta tecnología se llama Food Ink y se encuentra en Londres, por lo que no solo ofrece sus tres comidas provenientes de la impresión 3D, sino además sus platos, mesas y cubiertos también son impresos con esta tecnología.
Al principio, la idea de alimentarse gracias a “algo” que interpreta instrucciones y que deposita material para su composición, para algunos comensales no es una idea atractiva, pero, cuando noten que la comida tiene buen sabor, y que, sobre la marcha, tienen la posibilidad de influir en la preparación de pastas, salchichas, palitos de pan y muchos cereales para el desayuno, seguro la “impresión” cambiará.
Finalmente, la impresión de alimentos 3D planteó un desafío inicial relacionado con la consistencia y viscosidad que requiere el proceso para que el material emerja suavemente y mantenga su forma al depositarse. Por el momento aún se presentan algunas limitaciones y dichas empresas trabajan en ello, así mismo, los fabricantes de impresoras 3D laboran arduamente para ofrecer máquinas que puedan ofrecer opciones de alimentos personalizados en todos los grupos de alimentos, en un sin fin de opciones que satisfagan a sus futuros clientes.
Emilia Beltrán (Divulgación y difusión PIT-UAS)