Este viernes 31 de marzo, el Parque de Innovación Tecnológica (PIT) de la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS) recibió en su Aula de Capacitación a ponentes y asistentes del curso-taller Startupeando, evento para fomentar el emprendimiento entre los jóvenes, organizado por la incubadora Spin-UAS de la UAS en coordinación con la asociación civil Tomato Valley. Durante 54 horas, divididas entre el viernes, el sábado y el domingo, los equipos multidisciplinarios conformados por 35 jóvenes de diferentes carreras (como mercadotecnia, ingenierías, informática e incluso gastronomía) trabajaron en la formulación y el planteamiento de un proyecto, asesorados por profesionales de áreas como mercadotecnia y diseño.
La UAS es una institución de educación superior que no puede permanecer aislada, cuyas necesidades y capacidades la llevan a establecer importantes vínculos con diferentes actores gubernamentales, empresariales y sociales. En este sentido, cabe destacar que Tomato Valley es una asociación civil con siete años de experiencia promoviendo la cultura emprendedora en la región noroeste del país, trabajando en el emprendimiento de base tecnológica, así como en cuestiones de ciencia y tecnología. De ahí que la Dirección General de Vinculación y Relaciones Internacionales (DGVRI), a través de su Spin-UAS, haya concertado una colaboración con este colectivo, actor importante del ecosistema emprendedor sinaloense y que cuenta con un convenio de colaboración con Harvard.
En entrevista, el director operativo y el presidente y socio fundador de Tomato Valley, Alfredo Zamora y Fernando Gallardo respectivamente, comentaron que durante el primer día de actividades, Startupeando dota de herramientas a jóvenes motivados para adquirir aprendizajes. Dichas herramientas consisten en la explicación, por parte de expertos, sobre cómo se valida un proyecto, mercadotecnia digital, prototipado, modelos de monetización así como herramientas para iniciar un emprendimiento. En los días subsiguientes se da tiempo a los participantes para crear un prototipo (no necesariamente funcional), salir a vender su idea, regresar y hacer las pruebas necesarias para presentarlo frente a jueces para que, al final, el equipo que logre monetizar su idea en un mayor nivel y reciba una mayor cantidad de votos por medio de los jueces, pueda ganar el seguimiento del proyecto durante tres meses y recursos para la implementación del mismo. La multidisciplinariedad es un factor que permite que se den distintas soluciones a los problemas, ya que cada formación cuenta con una perspectiva distinta sobre el funcionamiento de las cosas, aseguraron.
Se promueve así, en alineación con el eje número 3 («Vinculación y extensión») del Plan de Desarrollo Institucional Consolidación 2017, la generación de alianzas estratégicas interinstitucionales, además de impulsar el espíritu emprendedor en la comunidad universitaria mediante la implementación de un programa que incentive la innovación. La DGVRI, con el apoyo del PIT-UAS, se encargó de la logística y de aportar equipo útil para llevar a cabo este evento cuyo propósito es generar más jóvenes emprendedores en la universidad y que esos jóvenes emprendedores puedan tener una incidencia en el desarrollo económico del estado.
Jesús Moroni Arellano (Comunicación y Difusión, PIT-UAS)